Ayer hablé con Caca. Caca me dijo caca caca. Y yo, caca, caca caca. "¿Después de tanta caca, me venís a caca?"
Caca. Caquísimo. De tanta caca, caca. Cuando caca, me caca. ¡Qué caca! Si caca, que caca, que caca caca, que no caca. Ni caca, caca. Ni caca.
Que caca de acá, que caca de allá. Pero de caca, ni caca.
Y bueno, al final caca.
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